Esta regla es una estrategia de presupuesto práctica para el ahorro, de acuerdo a la regla se divide el ingreso neto en tres categorías: El 50% se destina a necesidades y gastos fijos, el 30% se destina al entretenimiento como salidas, servicios de streaming, etc., y finalmente el 20% se destina al ahorro y pago de deudas, proporciona un marco de administrar el dinero inteligentemente y tomar mejores decisiones con respecto a las finanzas personales.

Esta regla cuenta con un enfoque que las personas pueden utilizar para establecer presupuestos, ya sea por prioridades, ubicación geográfica (De acuerdo a los costos), o por ingresos variables. Cabe recalcar que es importante recordar que se requiere de compromiso y disciplina para mantenerse al día con los gastos, invertir tiempo y esfuerzo para que las finanzas se queden bajo control, así se logra alcanzar las metas financieras propuestas.

El presupuesto es un proceso continuo que se revisa periódicamente, asegurándose que refleje la situación financiera actual y los cambios dentro de la economía local y global. Al mismo tiempo e igual de importante se sugiere la implementación de herramientas para el seguimiento del mismo para ayudar a los usuarios a supervisar los gastos e identificar áreas en las que se pueden reducir los costos obteniendo mas valor del presupuesto, manejando el control de las finanzas y asegurarse de cumplir los objetivos financieros a corto y largo plazo.

Por ejemplo, si un individuo gana $2,000 al mes después de impuestos, debería gastar aproximadamente $1,000 en necesidades como vivienda, comida, y facturas esenciales. Luego, se pueden gastar $600 en deseos, que incluyen gastos como entretenimiento, cenas, compras no esenciales, etc. Finalmente, $400 se debe asignar para ahorros o para pagar deudas existentes. Este método proporciona un marco simple y fácil de seguir para manejar las finanzas personales y puede ser un excelente punto de partida para aquellos que son nuevos en la planificación financiera.